Dislipidemias


Se conoce como Dislipidemias a las alteraciones cuantitativas y/o cualitativas de las cifras de lípidos (grasas) en la sangre, capaces de inducir un impacto acelerado en el proceso aterosclerótico.

Alteraciones Cuantitativas

Para llegar al diagnóstico hemos de partir del denominado Perfil Lipídico, el cual consta de las cifras de:
  • Colesterol Total.- Normalmente menor de 200 mg/dl
  • Triglicéridos.- Normalmente menor de 150 mg/dl
  • Colesterol LDL.- Normalmente menor de 130 mg/dl
  • Colesterol VLDL.- Normalmente menor de 30 mg/dl
  • Colesterol HDL.- Normalmente mayor de 40 mg/dl
Como es natural, en la mayoría de los casos se exigen cifras inferiores a los topes señalados, con excepción del también denominado Colesterol Bueno o HDL, cuya función es inversa a los otros, esto es, ir limpiando las paredes vasculares de las grasas depositadas por el resto de este tipo de partículas.

Alteraciones Cualitativas

Es también posible observar alteraciones en las proporciones de estas partículas, también conocidas como Lipoproteínas. De esta manera, se pueden estructurar cocientes llamados Indices de Riesgo Lipídico (y no coronario como usualmente se les denomina). Así tenemos:
  • Riesgo Lipídico 1.- Cociente Colesterol Total/Colesterol HDL con V.N. menor de 4.5
  • Riesgo Lipídico 2.- Cociente Colesterol LDL/Colesterol HDL con V.N. menor de 3.5
  • Riesgo Lipídico 3.- Cociente Triglicéridos/Colesterol HDL con V.N. menor de 4.0
Surge también el Indice Multifactorial de Riesgo Lipídico (IMRL) que no es más que el producto de los Riesgos Lipídicos 1, 2 y 3. Es así como podemos establecer los siguientes rangos:
  • Riesgo Mínimo.- IMRL menor de 60
  • Riesgo Leve.- IMRL 60-150
  • Riesgo Moderado.- IMRL 150-350
  • Riesgo Severo.- IMRL > 350
Estos criterios nos permiten decidir en forma práctica a que paciente tratar, y con qué intensidad hacerlo, es decir, si emplear dietas o fármacos, y qué dosis emplear.